Por: Priscila Isidro Psicoterapeuta| Escucha el Episodio
Buenas noches a todos. Es un placer estar aquí con ustedes para hablar de temas cotidianos, de nuestras experiencias y sentimientos, y cómo podemos crecer a partir de ellos. Hoy, después de haber pasado el 14 de febrero, quiero abordar un tema que considero muy relevante: la codependencia en las relaciones.
La Naturaleza de la Codependencia
La codependencia puede ser comparada con un río subterráneo; es una corriente que no siempre se ve, pero está ahí, afectando nuestras vidas. Aunque por fuera todo parezca tranquilo, por debajo puede haber una fuerza que nos arrastra y no nos permite tener relaciones sanas y satisfactorias.
¿Qué es la Codependencia?
La codependencia no se limita a las relaciones de pareja, sino que puede darse en cualquier tipo de relación: entre padres e hijos, amigos, familiares, e incluso en el ámbito laboral. Es un patrón de comportamiento donde las necesidades de otra persona se priorizan sobre las nuestras, y nuestro bienestar depende de alguien más.
Identificando Relaciones No Saludables
Para saber si estamos en una relación codependiente, es importante aprender a identificar ciertas señales:
Señales de Alerta
- Excesiva Preocupación: Cuando nuestras prioridades siempre giran en torno a los problemas de los demás.
- Descuido Personal: Sacrificamos nuestro bienestar por el de otros.
- Falta de Límites: Dificultad para decir «no», por miedo al rechazo o al conflicto.
Ejemplos Comunes
- Una madre que sigue sacrificándose por su hijo adulto.
- Amistades donde uno siempre da y el otro solo recibe, creando una deuda emocional.
Caminos hacia Relaciones Saludables
Reconocer estos patrones es el primer paso para mejorar nuestras relaciones. La clave está en establecer límites saludables y asegurarnos de que nuestras interacciones sean equitativas y satisfactorias.
Estableciendo Límites
- Aprende a decir «no» cuando es necesario.
- Prioriza tus propias necesidades sin sentir culpa.
- Asegúrate de que haya reciprocidad en tus relaciones.
La Importancia del Autocuidado
El autocuidado es esencial para mantener relaciones sanas. Es importante recordar que somos responsables de nuestro bienestar y que, para cuidar de otros, primero debemos cuidarnos a nosotros mismos.
Reflexión Final
Las relaciones pueden ser sanadas y mejoradas si estamos dispuestos a trabajar en ellas. La conciencia y la honestidad con nosotros mismos son fundamentales para vivir una vida plena y disfrutar de nuestras relaciones.
Espero que esta reflexión les sea útil para evaluar y mejorar sus relaciones. Les deseo una feliz noche y que sigan disfrutando de una vida plena y feliz. ¡Nos vemos hasta la proxima!

